El concepto de soft skills o habilidades blandas se ha popularizado mucho en los últimos años en el mundo laboral. No es de extrañar que, en las entrevistas de trabajo, el profesional de recursos humanos te pregunte sobre ellas. Sin embargo, todavía hay dudas acerca de qué son y qué ventajas pueden aportarnos a la hora de encontrar trabajo.
A continuación, conoceremos en detalle a qué hace referencia dicho concepto y recuerda que, en Grupo Tarraco Formación, contamos con diversas escuelas asociadas para que encuentres la formación profesional que más se adapte a ti.
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Qué son las Soft Skills
Su traducción literal es “habilidades blandas”. Este término hace referencia a las competencias sociales de una persona. Es decir, a aquellas habilidades que son inherentes a nuestro carácter, que se adquieren en la vida diaria y que permiten a las personas integrarse exitosamente en las empresas y en sus ambientes laborales.
Sin embargo, algunos expertos rechazan su traducción literal y prefieren denominarlas habilidades esenciales, habilidades clave o employability skills. A su vez, defienden que son imprescindibles y básicas, pero también destacan la dificultad de enseñarlas o aprenderlas.
Su importancia en la actualidad
Diversos estudios recogen que a este tipo de competencias blandas o esenciales se les atribuye hasta un 80 o 90% del éxito de una persona dentro de su entorno laboral. Mientras, ese porcentaje restante del 10 o 20% lo ocupan las supuestas habilidades duras.
Dichas habilidades duras, o hard skills, son las habilidades técnicas o de conocimientos que poseen los empleados para desarrollar su actividad laboral, aquellas que son demostrables y se pueden acreditar. Es decir, son las que adquirimos mediante formación y se evalúan a través de la experiencia profesional.
El equilibrio entre ambas habilidades es lo que nos define como trabajadores y es lo que las empresas de hoy en día buscan: perfiles profesionales que cuenten con ambas habilidades, tanto las fuertes como las blandas. Asimismo, incluir en el CV una pequeña lista de soft skills y de hard skills puede ser de gran ayuda tanto para que los departamentos de RR. HH. elijan un perfil que destaque sobre otros, como para las personas que buscan empleo.
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¿Cómo poner soft skills en un currículum?
Para destacar las soft skills en un currículum, es importante incluirlas de manera estratégica en la sección de habilidades y en la descripción de experiencia laboral. No basta con enumerarlas; es recomendable demostrar cómo se han aplicado en experiencias previas. Por ejemplo, en lugar de solo mencionar “habilidades de liderazgo”, se puede escribir: “Lideré un equipo de 10 personas en un proyecto de innovación, logrando un aumento del 20% en la eficiencia operativa”.
Además, es clave adaptar las soft skills a la oferta de empleo. Leer detenidamente la descripción del puesto y destacar aquellas habilidades interpersonales que sean más relevantes para el cargo. Si el empleo requiere trabajo en equipo y comunicación efectiva, se pueden incluir ejemplos concretos de cómo se han desarrollado estas habilidades en experiencias previas. Esto ayudará a captar la atención del reclutador y aumentará las posibilidades de ser seleccionado.
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Habilidades más buscadas por las empresas
Las empresas valoran una serie de soft skills que consideran esenciales para el éxito profesional. A continuación, se presentan algunas de las más demandadas:
Liderazgo
El liderazgo es una de las soft skills más demandas, ya que la capacidad de influir y motivar a los equipos de trabajo tiene un alto valor para cualquier empresa o sector. Esta, no solo se limita a quienes ocupan cargos directivos, sino que tener la capacidad de influir positivamente en otros compañeros y compañeras garantiza el éxito del proyecto. Las empresas buscan personas con esta capacidad, puesto que facilitan la innovación y el crecimiento organizacional.
Creatividad
La creatividad es clave cuando se busca innovar. La demanda de perfiles creativos está en auge debido a la gran competencia que existe entre los diferentes sectores laborales, cada vez es más importante marcar la diferencia. Esta habilidad es imprescindible en el mundo laboral actual. Implica capacidad de generar ideas innovadoras, resolver problemas de manera original y aportar soluciones diferentes a los desafíos cotidianos. Las empresas valoran empleados que puedan pensar fuera de los convencional y aportar una visión fresca a los proyectos.
Inteligencia emocional
La inteligencia emocional es, quizás, la habilidad más importante en esta lista de soft skills. Es muy importante saber identificar y controlar las propias emociones y las de quienes nos rodean. Además, la inteligencia emocional nos ayuda a tomar mejores decisiones, gestionar nuestros conflictos internos, ser más innovadores y sobre todo ser más empáticos, lo que en definitiva nos favorece a la hora de trabajar en grupo.
Pensamiento crítico
Cada vez más se buscan perfiles inconformistas, que tengan crítica propia, que puedan analizar objetivamente qué hacen y cómo pueden mejorarlo. Esta permite evaluar diferentes perspectivas y tomar decisiones fundamentales, crucial en entornos donde se requiere resolver problemas complejos y tomar decisiones basadas en datos y evidencias, en lugar de suposiciones.
Trabajo en equipo
Saber trabajar en equipo es una de las principales características que se busca en un empleado, ya que es imprescindible para cualquier ámbito. Saber que formas parte de un todo y que tanto tu trabajo como el de los demás es imprescindible para que los proyectos salgan bien es fundamental. Además, las empresas buscan empleados que sepan gestionar conflictos, fomentar la cooperación y mantener un ambiente de trabajo armonioso, ya que tiene un impacto en la productividad y el clima laboral.
Gestión del tiempo
Ser conscientes de las tareas que debemos realizar y del tiempo que disponemos para ello es realmente importante para ser resolutivos y eficientes en nuestro trabajo. Una buena gestión del tiempo permite aumentar la productividad, reducir el estrés y garantizar el cumplimiento de los plazos sin sacrificar la calidad del trabajo.